1/10/08

¿Me perdonas? xfa... (2)

Entréguense eternamente a Jesús… y Él se servirá de ustedes para hacer grandes cosas, a fin de que crean mucho más en su amor que en su debilidad. Crean en Él… confíen en Él con una fe ciega y absoluta, seguros de que Él es el Señor. Convénzanse de que únicamente Jesús es el secreto de la vida y que la santidad no es otra cosa que el propio Jesús que vive en su interior por su gracia.
Beata Madre Teresa de Calcuta


Este CIRCULAR no es muy extenso
porque creemos que el video de hoy habla por sí solo


La necesidad de perdón de nuestros pecados

Así es. Todos tenemos cosas buenas, nadie lo duda. Pero al mismo tiempo no podemos negar –si queremos ser sinceros- la presencia del mal en nuestra vida. Somos seres limitados, tenemos una cierta inclinación al mal y también tenemos nuestros defectos; y como consecuencia de todo esto nos equivocamos, cometemos errores y pecados. Esto es evidente y Dios lo sabe. ¿Y qué pasa? Por qué nos hacemos tanto lío en la cabeza si tenemos a un pedazo de Padre –cuyo representante es el sacerdote- esperándonos en todos los confesionarios de la tierra. Y, hay que añadir, que nos espera con los brazos abiertos y con unas ganas inmensas de perdonar y olvidar. Pero, para que eso pueda ser, tenemos que reconocer que somos pecadores.

San Juan dice que "si decimos que no tenemos pecados, nos engañamos y la verdad no está en nosotros. Si confesamos nuestros pecados, fiel y justo es Él para perdonar nuestros pecados y purificarnos de toda injusticia. Si decimos que no hemos pecado, le hacemos mentiroso y su palabra no está en nosotros". (1 Jn 1, 9-10)